
En mis tantas muertes anteriores
a la puerta del cielo me negaron entrada.
Me privaron de pasar al paraíso
por decir la contraseña equivocada.
Mis palabras fueron verdaderas
mas tenía que volverme, reencarnada
a caminar por diferentes rutas,
a luchar, ya con pluma, o con espada.
Recuerdo que una vez dije: -"Fui buena".
-"Vuelve" – contestaron- "no aprendiste nada".
Otra vez, convincente: - "Ayudé a muchos".
-"No es suficiente"-, respondieron, -"anda".
Siglos más tarde regresé a tocar la puerta;
al guardián pedí perdón, fui perdonada
mas tuve que, de nuevo, andar la senda,
y me pasé una vida buscando la palabra.
Así traté de entrar, no sé luego de cuántas muertes
y la puerta del cielo permaneció cerrada.
¿No será que –me dije- ya no existe
otra oportunidad para mi alma?
Hice un último intento, hace muy poco
y pedí a Dios por favor que me escuchara
-"¿Qué has hecho en tu vida?" - "Amé", le dije.
El Señor me abrazó y respondió: - Pasa.
a la puerta del cielo me negaron entrada.
Me privaron de pasar al paraíso
por decir la contraseña equivocada.
Mis palabras fueron verdaderas
mas tenía que volverme, reencarnada
a caminar por diferentes rutas,
a luchar, ya con pluma, o con espada.
Recuerdo que una vez dije: -"Fui buena".
-"Vuelve" – contestaron- "no aprendiste nada".
Otra vez, convincente: - "Ayudé a muchos".
-"No es suficiente"-, respondieron, -"anda".
Siglos más tarde regresé a tocar la puerta;
al guardián pedí perdón, fui perdonada
mas tuve que, de nuevo, andar la senda,
y me pasé una vida buscando la palabra.
Así traté de entrar, no sé luego de cuántas muertes
y la puerta del cielo permaneció cerrada.
¿No será que –me dije- ya no existe
otra oportunidad para mi alma?
Hice un último intento, hace muy poco
y pedí a Dios por favor que me escuchara
-"¿Qué has hecho en tu vida?" - "Amé", le dije.
El Señor me abrazó y respondió: - Pasa.
(De la serie: “El amor y la muerte”)
2 comentarios:
Qué fácil es recurrir a la Energía con la que fuímos creados. Es lo natural. Y, sin embargo, nos empeñamos en olvidar, en juzgar, en creer en una separación que no existe, pues somos Uno.
Gracias Pat, querida amiga de otros tiempos, por recordarnos nuestro Contrato de Vida: El Autoconocimiento, recordar y Amar.
Un Abrazo de Luz desde la Paz y el Amor.
Rafael
Te cuento que cuando leí éste poema,por primera vez, fue mostrándole a mi madre lo hermoso que escribís...
Ese día mi mamá había venido (como toda madre) a darme su apoyo invisible, sin decirlo sin mencionar nada, porque en esos días yo había tenido una gran desilusión sentimental.... Cuando llegué al final de tu maravilloso poema, no te pude dejar comentario....es que con los cristales húmedos no se puede escribir...
Gracias por compartir!!!!!
Publicar un comentario